[align=center]EN VESPA POR ITALIA “OPERACIÓN CAJEROS AUTOMATICOS” 4ª parte
Día 10 de Junio Martes, de Genova a Lucca[/align]

[align=justify]Hace un día magnífico la ruta de hoy es siempre paralela al Mediterraneo, como cogemos la carretera de la costa, vamos pasando poblaciones que están pegadas al acantilado, son todo subidas y bajadas y los pueblos estrechos y con mucho tráfico, se nota la falta de espacio, porque proliferan los Vespacares, (Apes) modernos, pero de tres ruedas que van como rayos subiendo y bajando las cuestas.

El paisaje es magnífico, da envidia ver el mar, pero no hay playas, casi todo son acantilados , en un cruce, vemos la posibilidad de visitar Portofino que esta situado en una pequeña peninsula , y para ello bajamos unas considerables pendientes, hasta el fondo del acantilado que es donde esta esta localidad.

Tan al fondo esta, que aunque parezca mentira, no tenemos sitio donde poner las motos, habría que haberlas dejado en la carretera de bajada y después cargar con el equipaje, así que decidimos ver, lo que nos dejen estando montados en la moto. En España seguro que habríamos podido acoplar las motos en algún rincón, pero aquí están continuamente haciéndonos señas de que van a multarnos los Carabinieris.

Otra vez para arriba, el amigo Ose, me mira y dice …Quiyo va jarta de curvas. Los pueblos que pasamos por la orilla del mar, tienen valladas las playas, parece ser que son artificiales, cada municipio ha trabajado para ganarle al mar un trozo de arena donde se puedan bañar los del pueblo, y lo cobran. Como somos roñosos, buscamos la esquina de la playa y nos metemos de gratis.

aquí estamos cual Argonautas antes de entrar en combate con los Cíclopes por el Vellocino de Oro, con el Mediterraneo en todo su esplendor, refrescándonos para seguir la sinuosa carretera del mar, ahora con interés de encontrar un sitio donde

mangiare

, en una subida en una lado de la carretera se anunciaba un restaurante que al otro lado colgando del acantilado tenia una terracita cubierta con mesas, y un futbolin. Que buena pinta, rapidamente tomamos posesión y mientras le jugaba una partida a Sagrario veo que cruza la carretera “il cameriere con un vassoio pieno di bottiglie di birra Moretti”, dejamos la partida a medias y como il camariere era motorista nos trajo unos quesos para que nos sirvieramos.

Ni que decir tiene que nos pusimos moraos y tantas Birras cayeron, que por mucho que intento recordar, no se que leches comimos, el cameriere nos enseñó una Ducati (como no), que tenía guardada bajo una lona, pero para el servicio diario usaba una Yamaha 600.

tan fuerte fue la refriega, que el Argonauta Osé tuvo que reposar de la herida mortal que le infringieron las curvas y la birra Moretti.

Volvemos a la ruta, desde luego tiene razón Osé vaya harta de curvas, pero el clima es delicioso, te permite ir en camiseta y pantalones cortos, y cuando tuvimos de nuevo ocasión, (que no fueros muchas), volvimos a parar en una playa, con aparcamiento sobre la arena includo (me acuerdo de la caída que tuve en Marruecos por el mismo motivo) y voy con cuidadin, pero a pesar del cuidado y las precaucioneas, no me gana nadie a la hora de entrar en el mar, y es que con tantas curvas, Birras y apuradas de frenada, nada mejor que un refrescante baño en todo el Mediterraneo.

En este plan continuamos, hasta que llegamos a La Spezia, importante enclave naval y base militar en el Mediterraneo, paramos en una birriagasolinera a tomar un refresco sacado de una máquina, a pesar de la carretera me venia durmiendo un poco.

Este enclave militar sufrió en la segunda guerra mundial bombardeos masivos por parte de los Aliados, pues aquí los Italianos tenian la base de submarinos más importante de todo el pais, pasamos de largo contemplando las instalaciones navales, ya se nos esta haciendo tarde para llegar a Lucca a una hora razonable, aquí tampoco tenemos el mismo hotel, en un principio pensamos llegar hasta el hotel de los Vesperdidos y luego buscar el nuestro, porque no estan lejos uno del otro, pero ya de noche y despues de consultar los Gps, los Vesperdidos salen disparados y aunque intentamos cogerlos, nos perdemos de ellos, tenemos que parar y consultar la documentación de nuestra reserva, para poder dirigirnos a nuestro hotel. Cuando llegamos es una puerta cerrada con un teclado alfanumérico donde tienes que teclear una clave para abrirla. Encima tiene un cartel “Benbenuti alla Corte del Folletti”…..Huy..Huy …..“Buona Sera io sono Miguel Angel Fernández que he reservato la notte con Booking” ….. ¡!! No capisco, parlare en inglese…???... La jodimos..oye tu sabes algo de inglés???...mi hijo me mira con cara como si yo fuera gilipoyas ¡! Anda, traé el telefono. …. Ya me veia durmiendo en la P. Calle, pero por un milagro de la comunicación verbal, veo que mi hijo teclea una clave y ¡!! Zas la puerta se abre…. ¡ Que hotel mas mono (dice Sagrario), a mi me parece una casa de citas, encima del mostrador hay un sobre con mi nombre y una llave con un número de habitación, subimos al segundo piso y la habitación tiene cama con dosel, pintada de un colorcito malva, que unido a los lamentos que se escuchaban de la habitación del primer piso despejó mis dudas.. Efectivamente era una casa de citas.

Cuando quisimos acudir al centro de Lucca ( donde esta el Duomo) ya estaban los bares cerrados, los Vesperdidos habian picado por ahí antes de llegar nosotros y al final cenamos de pié en una tiendita que hace Paninis o algo parecido. Para animar un poco, invito a una ronda de Moretti, que la señora nos sirve encantada del chollo que le ha caido a última hora. [/align]

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